En bastantes ocasiones, a lo largo de la vida, necesitamos un reencuentro con el amor y los
sentimientos de ternura hacia la propia y personal belleza–temperamento. Estos actos de autoestima pueden ayudarnos a su conquista y a vivir feliz diciéndole adiós a
los miedos y complejos.
1-
Mírate todos los días como un verdadero milagro.
2-
Recuerda que eres hermosa, aunque muchas veces tengas que ahogar una voz
interior que te dice: no, no lo eres. Recuerda que eres hija del Amor de Dios
3-
Ama profundamente tu identidad única y conoce que lo que haces nunca podrá
reproducirse.
4-
Tú verdadera belleza saldrá a la luz cuando ames con sinceridad a la mujer en
ti y contribuyas con tu vida a la sanación del mundo.
5-
Debes confiar en que sí puedes tomar decisiones por ti misma.
6-
No le tengas miedo a fracasar o fallar. Recuerda que si nunca fracasas no
tendrás la oportunidad de descubrir la fortaleza y el valor que residen en ti.
7-
Cuando las cosas no vayan como tu las tenías planeadas, permítete sentirte
defraudada pero nunca inferior o ridiculizada.
8-
Procura no ponerte a la defensiva cuando seas criticada o se te llame la
atención por algo que esta mal.
9-
No pierdas tu tiempo pensando si eres lo suficientemente buena para esta o
aquella tarea. Haz lo mejor que puedas hacer y siéntete satisfecha.
10-
Ese pensamiento que te hace pensar que no puedes pasar una materia, aprender un
instrumento o conquistar un paso de baile. ¡Elimínalo!
11-
Nunca pienses que tu valor radica en tu belleza o títulos. Si has perdido tu
trabajo no permitas que te haga sentir que eres una fracasada. Trabaja en
recuperarte emocionalmente cuanto antes y sigue adelante.
12-
Si en tu lugar de trabajo te hacen la vida de cuadritos por algún motivo, no
dejes que nazca la maleza de la inseguridad.
13-
Si aspiras a un puesto mejor dentro de tu organización y no aplicas porque no
sientes que puedes ser elegida, date cuenta que tu misma te bloqueas. Actúa sin
temor.
14-
Si fuiste a una entrevista de empleo y no lo conseguiste no pienses que es el
fin del mundo. Recrea en tu mente el proceso y descubre en dónde pudiste haber
fallado.
15-
Si las modelos que ves en la revistas te inquietan, no las mires más.
16-
Si tuviste alguna experiencia traumática de niña que te dejo con la seguridad
de ser fea, gorda, o poco inteligente, identifica eso que te molesta y trabaja
diligentemente para sanar tu trauma.
17-
Si has identificado que te inhibes o retraes en situaciones sociales diversas,
rétate a ti misma a comportarte de la manera opuesta.
18-
No temas a los cambios, confía que estos siempre serán para beneficio del desarrollo
de tu personalidad.
19-
Si te comparas constantemente con alguien, empieza a observar un poco más tus
propios logros.
20-
Si piensas que la suerte no está de tu lado porque tuviste una niñez dolorosa,
es hora de que lo superes. La fuerza del espíritu humano puede todo.
21-
Pensar bien sobre ti misma quiere decir aceptar el regalo de la vida que Dios
te dio al crearte. Agradécelo.
22-
Cuando hagas algo mal no te insultes a ti misma con expresiones como tonta o
inútil. El inconsciente tiene una capacidad enorme para creérselo. Corrígete.
23-
Si el chico que te gusta no se fija en ti no pienses que es porque no eres
suficientemente atractiva. Algo mejor te espera. Sé paciente.
24-
¿No te ríes de tus propios errores? Aprende a hacerlo y verás que libertad
sientes.
25-
Es bueno estar rodeada de gente que te aprecie y respete, pero si alguna vez no
lo hacen no pienses que eso disminuye tu valor.
26-
Tu cuerpo es el instrumento para la acción. Respétalo y cuídalo.
27-
Hay un tipo de hambre más fuerte que la de pan. Es el hambre por amor, solía
decir la Madre Teresa. Ama quien eres para poder darlo a cantaradas y sin
complejos.
28-
La primera responsabilidad del ser humano, expresaba Henry Winkler, es darse la
mano a sí mismo. Hazlo.
29-
Si eres madre, tu hija aprenderá a relacionarse de acuerdo a lo que vea en tu
propio desarrollo.